Saltar al contenido
Accueil » Recursos gratis » Adrenalina: la hormona y neurotransmisor del estrés en perros

Adrenalina: la hormona y neurotransmisor del estrés en perros

    Comprendiendo el papel dual de la adrenalina en la respuesta al estrés y el comportamiento canino

    Las hormonas y neurotransmisores del estrés en perros, al igual que en otros mamíferos, juegan un papel crucial en la respuesta al estrés y en la regulación de las emociones y comportamientos asociados. Aquí tienes una descripción de la hormona adrenalina, que funciona principalmente como hormona pero también puede tener una función de neurotransmisor, involucrada en la respuesta al estrés en perros. Cabe destacar que investigaciones recientes (Berger et al., 2019, Cell Metabolism) sugieren que la hormona osteocalcina (hormona derivada de los huesos) también puede tener un papel en la respuesta de «lucha o huida» y en la adaptación al estrés, pero este es un tema para otro artículo.

    Adrenalina (epinefrina por su denominación común internacional)


    La adrenalina, conocida como epinefrina, es una hormona que también puede tener una función de neurotransmisor en perros (y en otros mamíferos, incluidos los humanos). Su dualidad en estas funciones es esencial para entender cómo los perros responden al estrés.

    Función como hormona

    Producción y liberación: la adrenalina actúa como una hormona cuando es secretada por la médula de las glándulas suprarrenales, que están situadas sobre los riñones. En respuesta a una señal de estrés, las glándulas suprarrenales liberan adrenalina directamente en el torrente sanguíneo.
    Efectos: como hormona, la adrenalina tiene efectos más amplios y prolongados en todo el cuerpo. Aumenta el ritmo cardíaco, la presión arterial y los niveles de glucosa en la sangre para proporcionar energía adicional. También incrementa el flujo sanguíneo a los músculos principales y reduce el flujo hacia áreas menos críticas en situaciones de emergencia, como el sistema digestivo.

    adrenalina en la respuesta al estrés de los perros

    Proceso de producción:

    1. Conversión de tirosina: la síntesis de adrenalina comienza con el aminoácido tirosina, que se convierte en L-DOPA (L-3,4-dihidroxifenilalanina) por la enzima tirosina hidroxilasa.
    2. Formación de dopamina: L-DOPA se convierte en dopamina por la enzima DOPA descarboxilasa.
    3. Conversión a noradrenalina: La dopamina se convierte en noradrenalina por la enzima dopamina β-hidroxilasa.
    4. Síntesis de adrenalina: Finalmente, la noradrenalina se convierte en adrenalina por la enzima feniletanolamina-N-metiltransferasa (PNMT).

    Función como neurotransmisor

    Liberación y acción: la adrenalina actúa como un neurotransmisor cuando es liberada por las neuronas del sistema nervioso simpático. En esta función, se libera en las sinapsis, que son los puntos de comunicación entre las neuronas, y transmite señales que preparan al cuerpo para una respuesta rápida.
    Efectos: como neurotransmisor, la adrenalina ayuda a aumentar la frecuencia cardíaca, dilatar las pupilas, y redistribuir la sangre hacia los músculos esqueléticos. Esto facilita una respuesta inmediata a situaciones de amenaza, permitiendo al perro reaccionar rápidamente, ya sea para huir o enfrentarse a un peligro (la respuesta de «lucha, huida o freeze»).

    Proceso de producción:

    1. Conversión de tirosina: similar al proceso en las glándulas suprarrenales, la síntesis de adrenalina en las neuronas adrenérgicas también comienza con la tirosina.
    2. Formación de dopamina: la tirosina se convierte en L-DOPA, luego en dopamina.
    3. Conversión a noradrenalina: la dopamina se convierte en noradrenalina.
    4. Síntesis de adrenalina: en algunas neuronas, la noradrenalina se convierte en adrenalina.

    Razón para la dualidad de funciones

    La adrenalina cumple tanto con funciones de neurotransmisor como de hormona debido a la necesidad de una respuesta rápida y coordinada al estrés que involucra múltiples sistemas del cuerpo. La principal diferencia en la producción de adrenalina como hormona y como neurotransmisor radica en el lugar donde se lleva a cabo y en el contexto en el que se libera. Aquí se detallan algunas razones:

    Respuesta inmediata y localizada:
    Como neurotransmisor, la adrenalina puede actuar rápidamente en los sitios específicos donde es necesaria, facilitando una respuesta instantánea a amenazas inmediatas.

    Coordinación sistémica:
    Como hormona, la adrenalina asegura que los efectos de la respuesta al estrés se extiendan a todo el cuerpo, coordinando diversas funciones fisiológicas necesarias para enfrentar o escapar del peligro.

    Duración y alcance:
    Los efectos de la adrenalina como neurotransmisor son rápidos pero de corta duración y localizados. En cambio, como hormona, la adrenalina tiene efectos más prolongados y sistémicos, asegurando que el cuerpo se mantenga preparado para la acción durante el tiempo necesario para lidiar con la situación estresante.

    Ejemplos en perros

    Cuando un perro percibe una amenaza, como un extraño acercándose o un ruido fuerte e inesperado, la adrenalina se libera rápidamente como neurotransmisor para iniciar una respuesta de lucha o huida. En situaciones de estrés sostenido, como en perros con ansiedad crónica o aquellos expuestos a entornos inestables, la adrenalina también se libera como hormona, manteniendo al perro en un estado de alerta prolongado. En perros, la liberación de adrenalina puede manifestarse como una mayor agitación, excitabilidad, y comportamientos de huida o agresión. También puede provocar temblores y vocalizaciones excesivas.

    Descubre también nuestro artículo: Diferencias entre neurotransmisores y hormonas en perros

    Deja una respuesta

    Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *